La iluminación en una tienda de ropa es un factor clave que se debe tener en cuenta tanto en el interior de tu local como en el escaparate o en los rótulos. Cada elemento debe siempre tener la luz correcta dependiendo de lo que se quiera transmitir o destacar. De lo contrario, determinados productos pueden pasar desapercibidos y al final, todo esto se traduce en un número menor de ventas.

Pero, ¿por dónde empezar? ¿Qué hay que tener en cuenta? ¡Te lo contamos en este post!

Antes de nada, ¿qué es lo que ofrece una buena iluminación en una tienda de ropa?

Utilizar una luz correcta permite aumentar las ventas. Pero, ¿cómo?

Por un lado, con una buena iluminación exterior consigues atraer clientes a tu local y, por otro, en el interior, logras que se sientan cómodos y a gusto al mismo tiempo que destacas productos de forma estratégica. Imagina que tienes una tienda deportiva y decides colocar una luz muy suave, con lo que cuesta distinguir cada producto… ¿Crees que los clientes volverán a tu tienda? Seguramente no, porque tienen que esforzarse por saber qué marca están comprando, ver el precio, etc… Evidentemente, este es un ejemplo algo extremo, pero que sirve para que te hagas una idea más visual de por qué hay que saber jugar con la luz en cada ambiente de tu tienda. Porque, además, no es lo mismo el tipo de luz que puedes poner en los probadores que en los mostradores o en la zona de compras. ¡La iluminación en una tienda de ropa es fundamental si se quiere aumentar las ventas!

Además, la luz también funciona como elemento estratégico pudiendo destacar unos productos por encima de otros y creando contrastes. De esta forma puedes provocar que a los compradores les llamen la atención los artículos que más te interese vender.

¿Qué factores hay que tener en cuenta en la iluminación en una tienda de ropa?

Cuando tienes en mente reformar, diseñar o decorar un local comercial tienes que tener en cuenta diferentes aspectos, ¿verdad? Lo mismo ocurre con la iluminación en una tienda de ropa. Antes de empezar el trabajo es necesario organizar bien todos los elementos para que luego no haya imprevistos o sorpresas de última hora. ¡Veamos cuáles son esos factores!

Estudia a fondo el espacio de tu tienda

Cada espacio es diferente y por eso es importante que lo estudies y que veas cómo le puedes sacar el máximo partido. Da igual si es un local grande o un local pequeño, todos tienen fortalezas y particularidades que lo harán único.

Además, recuerda comprobar que tienes la potencia suficiente para la iluminación que quieres implementar. Habla con un técnico y coméntale tus necesidades. Él te ayudará a decidir si es suficiente con la cantidad de energía que tienes ahora o necesitas hablar con tu compañía eléctrica.

Controla el gasto

Si no quieres sustos cuando te llegue la factura, es importante que dediques esfuerzos a reducir el gasto mediante luces de tecnología LED, una de las más utilizadas hoy en día. Con ellas, además, no estropeas los artículos ya que no emiten mucho calor y estarás contribuyendo no solo a reducir el importe de tu factura sino también a la mejora del medio ambiente.

Crea diferentes ambientes dentro de tu tienda

Además de conseguir que los clientes se fijen en un determinado producto, una luz adecuada también orienta al consumidor. En un solo vistazo, el futuro comprador sabe dónde está la caja, los probadores y las diferentes zonas de la tienda. Por eso, debes crear ambientes variados y cada uno de ellos debe estar pensado específicamente para esa zona concreta.

Por ejemplo, la zona de caja tiene que estar bien iluminada, ser muy cómoda y se debe ver todo a la perfección para evitar errores en los cobros y transmitir transparencia en el proceso de compra. Los probadores por su parte deberían tener una luz más cálida, que favorezca a todos los tipos de piel para que cuando prueben una prenda de ropa, vean no solo el producto, sino cómo les sienta a ellos.

Respecto al resto del local, puedes combinar distintos tipos de iluminación por productos y secciones. Volvamos al ejemplo de la tienda deportiva. Imagina que quieres promocionar un calzado de temporada, pero que se encuentra con otros tantos modelos de zapatillas. ¿Qué podrías hacer? ¡Muy simple! Podrías colocar el calzado a resaltar en un espacio especial y con una iluminación individual, para el resto de la sección de deportivas utilizar una luz con menos intensidad.

Por otro lado, recuerda que las luces jamás deben dirigirse al rostro de los clientes o los deslumbrarán y será muy incómodo para ellos.

La iluminación debe transmitir la personalidad de la imagen de marca

Este es otro aspecto clave de la iluminación en una tienda de ropa. Piensa que existen infinidad de tipos de luz que puedes usar para crear ambientes más sofisticados, más modernos, más íntimos o, por el contrario, más diáfanos. Sin embargo no debes olvidar que tu marca tiene una filosofía y unos valores concretos por lo que es conveniente que sean acordes al tipo de iluminación que utilices.

La claridad, un factor con el que no se debe fallar

Por supuesto, debes escoger una claridad adecuada, ya que si la intensidad es demasiado tenue o es excesiva puede estropear el escaparate o los productos que vendes.

Por otro lado, presta especial atención a tu escaparate, ya que si tiene luz natural suficiente tal vez de día no necesites iluminar nada, pero sí que tendrás que usar iluminación artificial cuando caiga la noche. Además, la luz variará dependiendo del lugar en el que te encuentres. No es lo mismo estar en un centro comercial que en una calle.

Finalmente desde Niddo Arquitectura & Diseño te recomendamos que antes de empezar a iluminar tu local hagas un trabajo previo: busca ejemplos en internet, recorre tiendas similares a la tuya para recoger ideas y que te ayuden a dar forma a tu proyecto.

También te aconsejamos que busques la ayuda de un profesional para que te guíe y te asesore en todo el proceso. En Niddo contamos con expertos en iluminación que se adaptarán a tu presupuesto, a tu tienda de ropa y a los valores que quieras transmitir. ¡Contáctanos!